Quizá Jeff Bezos, fundador de amazon.com, será uno de los hombres más ricos del mundo, pero él no se enorgullece de su perspicacia para los negocios, sino de “ser tonto”. Bezos dijo esto a Oprah Winfrey durante una entrevista por televisión en noviembre de 1999, en la que también reveló qué en realidad quería que amazon.com se llamara “Abracadabra” (la idea era que tuviera un nombre que empezara con la letra A, de modo que los motores de búsqueda la enumeran en primer lugar), pero que su abogado vetó la idea porque, por error, pensó que Bezos quería llamar a la empresa “Cadáver”.
Con una personalidad poco atractiva y frecuentes explosiones de risa estentórea e infecciosa, Bezos parece un poco tonto y definitivamente enamorado de la vida… y de las computadoras. “Siempre he sido un súper Nerd”, dijo a Winfrey, “pero en realidad soy un súper apasionado de las computadoras y de la forma en que pueden mejorar la calidad de vida”. No obstante, debajo de la risa y la torpeza, se encuentra una mente muy aguda, afilada en Wall Street, donde de 1990 a 1994 ayudó a diseñar un fondo de garantías cuantitativas muy avanzado desde el punto de vista técnico, para D. E. Shaw & Co. Antes de eso, Bezos, que en 1986 se graduó e Princeton de ingeniero electricista y en ciencias de la computación, ayudó a desarrollar sistemas de cómputo que administraban más de 250,000 millones de dólares en activos para Bankers Trust. En 1990 se convirtió en el vicepresidente más joven de esa firma.
Según su madre, Jacklyn Gise Bezos, Jeff siempre tuvo inteligencia y dinamismo. Jacklyn dijo a la revista People que, a la edad de tres meses, Jeff exigió ser cambiado de su cuna a una cama. Cuando su madre le dijo que no, porque no creía que Jeff fuero lo bastante grande para una cama, éste llevó un desarmador a su cuna para tratar de convertirla en una cama. Reconociendo la precocidad y el dinamismo de Jeff, sus padres lo inscribieron en un jardín de niños del sistema Montessori en el que, su madre recuerda, se concentraba tanto en un proyecto, que las maestras debían levantarlo literalmente en vilo de la silla, a fin de que se dedicara a algo nuevo.
El abuelo de Bezos, un gerente retirado de la comisión de energía, fue una importante influencia en su talentoso nieto. Alentó sus proyectos científicos y de ingeniería, y Jeff atiborró la cochera de la casa familiar con proyectos científicos. Pasó varios veranos en el rancho de su abuelo, en Catulla, Texas, donde aprendió a manejar una soldadora de arco, arreglar molinos y castrar ganado. Miguel Bezos, padre de Jeff, era un ejecutivo de Exxon Corp, que salió de Cuba a principios de la década de 1960. Al igual que muchos cubanos en el exilio, miguel Bezos instaló menores de éste, Mark y Christine, en Miami allí creó el DREAM Institute, para fomentar el pensamiento creativo y positivo en los niños más pequeños.
Es lógico que una persona que había demostrado tanta creatividad y una variedad de intereses tan amplia cuando niño, se aburriera un tanto en Wall Street. No obstante, allí fue donde Bezos vio de primera mano la forma en que las computadoras estaban revolucionando al sector de los servicios financieros. Comenzó a preguntarse sino había otro sector que pudiera verse igualmente afectado por la revolución en las computadoras. Mientras se encontraba e Wall Street, vio estadísticas que indicaban que Internet crecía a un ritmo de 2300% al año, aproximadamente. Para Bezos, que deseaba salir de Wall Street y convertirse en su propio jefe, esto sonaba a revolución.
Su estrategia fue muy sencilla: hizo una lista de veinte productos que podían venderse en línea y eligió uno. Los libros fueron los elegidos porque se dio cuenta que podría ofrecer una selección infinita, en tanto que evitaba el costo de abrir varias tiendas. Bezos decidió mudarse a Seatle, por que estaba cerca de los dos principales mayoristas de libros, además de que allí vivían varios talentosos genios de las computadoras. Mientras recorría el país en automóvil con su esposa Mackenzie, desarrolló un plan de negocios en su computadora portátil. El matrimonio se instaló en una casa alquilada de los suburbios de Seatle y puso una tienda en la cochera. Le tomó un año desarrollar los programas y crear la página en Internet, pero para 1995, Amazon.com ya estaba en marcha. Y los Bezos comenzaron a correr, asombrados por la cantidad de pedidos que recibían.
Hoy en día, Amazon.com es el tercer mayor vendedor de libros del mundo: cada día vende 57,000 libros y espera que en 1999 sus ingresos superen los 600 millones de dólares. Aproximadamente 13 millones de personas en más de 160 países comprar libros y demás artículos. Además de libros, la página en la Red hoy en día vende artículos electrónicos, juguetes, discos compactos, videos y juegos, ofrece tarjetas electrónicas de felicitación y subastas en línea. Hoy en día, amazon.com alberga a toda una familia de páginas en la Red, incluyendo Internet Movie Database, una amplia fuente de información sobre más de 15,000 películas. LiveBid.com, el único proveedor de subastas en línea que se realizan en vivo, y PlanetAll.com, un libro de direcciones, calendario y servicio de recordatorio en la Red.
A pesar del aumento impresionante en la ventas, aún es necesario que la empresa produzca utilidades, porque Bezos ha tomado dinero en forma constante para los programas de mercadotecnia y otras adquisiciones. Amazón.com invirtió grandes cantidades en otros importantes vendedores detallistas en Red. Como drugstore.com, HomeGricer.com y Pets.com Jeff ha sido sido acusado de tratar de serlo todo para todos los compradores, pero eso no parece importar a sus accionistas. Mientras más dinero perdía la empresa, más subía el valor de sus acciones, dando a la empresa 1,750 millones de dólares desde 1997 hasta fines de 1999: dinero que Bezos utilizó para sostenes la expansión (Wall Street Journal: “Over the Rainbpow With Amazon.com” por Gretchen Morgenson, 28 de noviembre de 1999). Bezos tiene una participación de 45 por ciento en la empresa, por lo que su fortuna personal es de 2,000 millones de dólares, a proximadamente.
Bezos admite abiertamente que su empresa no será rentable sino hasta el año 2002; pero señala que el aumento en los pedidos repetitivos indica que Amazon.com está desarrollando lealtad de marca, cuya consecuencia será una rentabilidad sostenible. Su última aventura es un programa zShops; que permitirá hasta a los vendedores más pequeños en línea unirse a la familia Amazon.com. por una cuota de 10 dólares al mes y una pequeña comisión de ventas, Amazon.com manejará el servicio al cliente para los detallistas: de las entrega a las garantías. Eso pondrá a la empresa en competencia directa con América Online, que ofrece un centro comercial virtual; y con WalMart, que está lanzando una gran ofensiva en la Red. A Bezos no le importa. Después de todo, ya se acostumbró a la entrada a la Red de Barnes & Noble y a las agresivas declaraciones del jefe máximo de la empresa, Forrester Research, en el sentido de que convertiría a Amazon.con en “Amazon.quemado”. research debió tragarse sus palabras cuando Amazon.com tuvo un crecimiento en los ingresos de 31 por ciento, que superó por mucho el aumento que tuvo Barnes & Noble, que fue de sólo 14 por ciento.
Y en lo concerniente a la amenaza de Wal-Mart, Bezos dijo a la revista Forbes: “En este momento tenemos más experiencia que todos los demás en las ventas en línea”.La misión de la empresa permanece sencilla, de acuerdo con Bezos, que dijo a la revista bLink de Earthlink (número de diciembre de 1999-enero de 2000), “Lo más importante en lo que tenemos que concentarnos obsesivamente es el cliente… Nunca la meta es la empresa más orientada hacia el cliente del mundo”.
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